La cara de mi madre mientras cenábamos me ha delatado que pretende sacarme de aquí y denunciar a la madre por locura permanente y desapego a sus hijos.
Y por echarle botella y media de vino al risotto,también.
Mientras mi madre sufría y la madre inglesa parloteaba y bebía, yo comía y mi hermana se lo pasaba teta.
De vez en cuando me preguntaba un "¿qué ha dicho?" y mi madre ponía cara de que la tarta le encantaba, cuando me decía que era la peor que había comido nunca.
Y la otra hablando de que tenemos que ir a ver las joyas de la corona.
Y bebiendo vino.
Como si la comida no tuviera suficiente alcohol.
Y para más locurón, yo le hablaba en inglés a mi madre,y en español a la inglesa.
Y bebía, para olvidar.
Vamos, una fiesta.
Las niñas en la cama y el padre con el niño mayor, comiendo ensalada en la habitación(por eso de que es vegano).
Para repetirlo cada noche.
Y hay más.
Cuando vuelvo a casa tras acompañar a mis chicas al bús,la madre me dice que no recoja que ya lo hace ella,que me acabe el Rioja y que me vaya a la cama. Que espera que mi hermana se venga pronto a Londres a vivir.
Parece que las caras de asco de mi madre no le han pasado desapercibidas...
Nuyë
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