Para saber cómo he llegado a esta situación de casi suicidio, os tengo que poner en antecedentes, claro, para que comprendáis o, al menos, intentéis poneros en mi lugar y pensar con mi mente de persona desquiciada.
He tenido un día muy bueno, además desde primera mañana, cosa rara en mí.
He llamado a los de las taxes para que dejaran de robarme mi dinero y he entendido cada palabra que la señora, una mujer amable no, más. Y todo ha ido de perlas.
Después, ya por la tarde he ido a comprar lo que me hacía más falta en la vida ahora.
(Digo ahora porque igual la semana que viene "lo que más me hace falta en la vida" es otra cosa)
Ah!
Una estantería, claro.En Argos, claro. Para poner todos mis libros, que los pobres llevan desde JUNIO en cajas, y creo que ya me vale.
Ésto la gente no lo entiende, pero yo necesitaba casi físicamente ver mis libros para sentir un poco menos de morriña por mi casa.
Total, que yo para esta hazaña he liado a dos amigos para que me ayudaran con los 22-casi 23- kilogramos de peso de mi estantería. Luego lo hemos llevado en bus y hemos subido dos pisos hasta mi casa.
Lo normal.
Luego se han ido y yo he empezado a montar el cacharro y ahí está muerto de risa en el suelo porque es muy tarde y no puedo darle martillazos.
Pero aún no ha acabado.
Ahora voy a llegar a por qué casi me da un chunguele.
Hace unos días compré una cosa por Amazon y estaba muy emocionada porque ya iba a poder usar mi nueva dirección para recibir cosicas.
Pues bien, no.
Y menos mal que me dio por comprobarlo hoy, porque me lo iban a mandar a mi antigua residencia, sí sí, a la casa de los locos donde viví cuando era au-apair!!
Así ha sido sí.
Estaba yo tan tranquila haciendo nada en el chisme éste y veo que me mandan el paquete en un par de días a esa dirección. Por supuesto, me volví loca y les escribí para rogarles que cambiaran los datos.
Y, justo cuando estoy acabando de escribirlo, medio histérica, el puñetero portátil del demonio decide sobrecalentarse y voilà, apagarse solo.
Creo que me voy a ir a la cama porque yo con tanta emoción no puedo vivir.
En serio.
Si yo sólo quería ver mis libros y releerlos y esas cosicas...
-Nuyë-
No hay comentarios:
Publicar un comentario