Hoy vamos a hablar del estrés y su tratamiento, ya seas desempleada/o, trabajadora/o, estudiante o te encuentres en un momento de tu vida en el que instinto primigenio burbujea en tu epicentro y lo único que te apetece es arreglar los problemas (serios o leves) a hostias.
A muchos se nos ocurren cientos de ideas diferentes y verdad es que cada uno somos distintos y nos gustan unas u otras cosas.
A mí me relaja nadar o estar todo un día entero en una librería o biblioteca pero, desde que casi no tengo tiempo libre, esas dos cosas están prácticamente descartadas.
Hoy era mi día off, que quiere decir que es un día de la semana (nunca un día del finde) en el que no tienes que ir al curro pero que, por muchas cosas quieras hacer, al final acabas vegetando en la cama hasta el día siguiente porque estás tan cansada que sólo el hecho de poner la lavadora te produce dolor incluso en las uñas.
Pero no hoy.
Por fin hoy quedé con un amigo y entre los dos llegamos a la conclusión de que la única manera de descargar la tensión es con violencia. Sí, sí, hay que hablar claro. No podemos, porque ya no somos simples homínidos, liarnos a leches con el primero que nos toque las narices, pero para eso el homo sapiens inventó laschatarrerías-losmartillos-loscochesviejos, el paintball y el puñetero call of duty, fuck yeah!
P.D. Tampoco estaría nada mal ésto
-Nuyë-
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